La sed de las palabras.

- Hola.
- Hola… ¿por qué regresas?
- Creo, es más estoy convencida, que no hemos dialogado.
- ¿Qué implicaría el diálogo?
- Va más allá de la intención, es un ir y venir, puede ser un gesto, una mirada y ésa mirada puede ser un segundo, pero un segundo sostenida. Hoy, tengo sed de palabras.

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